Juan Carlos Somoza presenta su novela «más tramposa»

El escritor relata en «La caja de marfil» la huida de una adolescente de un colegio

Mónica F. FERNÁNDEZ

Intriga y suspense marcan la trama de la novela policiaca «La caja de marfil», del escritor cubano, aunque afincado en España, José Carlos Somoza. El autor del libro desgranó ayer los entresijos de una historia que él mismo califica de «tramposa», puesto que constantemente se vive una mezcla entre la realidad y la ficción que llega a confundir de forma intencionada al lector.

Un desencadenante: una adolescente desaparece de su colegio sin previo aviso. Una peculiaridad: no es una chica cualquiera, sino la hija de un magnate madrileño, que hizo su fortuna gracias a la corrupción y a la intimidación. Un escenario: pequeño pueblo de la costa andaluza. Una nota: «Nunca regresaré y si me buscas, me hallarás muerta». Una duda: ¿secuestro?, ¿asesinato? Éstos son los puntos de arranque de «La caja de marfil» (Editorial Areté), última novela de carácter policiaco del escritor José Carlos Somoza (1959), nacido en La Habana «por casualidad» -como él mismo matiza- e instalado en nuestro país desde el año 1960 -«me siento español de pura cepa», ironiza.

A lo largo de 239 páginas el autor desvelará al lector los entresijos de una sociedad marcada por la corrupción. La violencia de las bandas juveniles, las actuaciones de las mafias organizadas o la corrupción empresarial son sólo tres ejemplos plasmados a través de una mezcla de realidad y ficción, que pueden llegar a confundirse, como el propio autor explica: «Hay una mezcla continua y constante entre la una y la otra, así que es la novela más tramposa que he escrito en mi vida, porque la combinación de ambos elementos la hace engañosa».

«La caja de marfil» está escrita para Quirós y Nieves Aguilar, los dos personajes fundamentales. «El libro está entregado a ellos, como si los hubiera conocido en la vida real», dice el escritor. Una relación entre el propio autor y los personajes, que tilda de «muy interesante», puesto que «consideramos muchas veces que los personajes acaban cuando acaba nuestro trabajo y si es así, bien está que les dediquemos esa labor a ellos para que tengan ese mundo privado y personal que les concedemos», añade.

En el acto, cuya presentación corrió a cargo de la responsable de relaciones externas de El Corte Inglés y coordinadora de Ámbito Cultural, Laura Castañón, José Carlos Somoza admitió que su novela se encasille en el género policiaco, porque eso le aporta una gran libertad, según sus propias palabras, pero matizó que «también es una novela de intriga, con cierto suspense, siempre dirigido a contar la historia de Quirós y Nieves Aguilar».

La novela cuenta con constantes alteraciones, a las que sus lectores ya están acostumbrados. «Mantengo un cambio tanto de ritmos como de estructura, hasta el punto de que parece que no están escritas por la misma persona», agrega. Unas variaciones que él mismo justifica: «Estoy firmemente convencido de que cada tema necesita una forma concreta de expresión, de un vehículo adecuado para manifestarse. La forma varía según la temática».

En definitiva, una novela de intriga que a lo largo de sus páginas va aportando las pistas necesarias, con una dosis elevada del factor sorpresa, hasta llegar al desenlace final.

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