Carlos Salem parodia la novela negra en "Matar y guardar la ropa"
El argentino Carlos Salem parodia la novela policiaca tradicional en ’Matar y guardar la ropa’, la historia de un asesino a sueldo escrita ’en tono irónico pero sin pretenderlo’, que se enfrenta a su vida personal en plena crisis de los cuarenta.
Durante la presentación de la obra en la Casa de América de Madrid, Salem desentrañó, sin revelar el final, la trama de su libro, que narra las aventuras y desventuras de Juan Pérez en un cámping nudista de Cartagena.
’La idea para escribir la novela surgió durante unas vacaciones en un cámping de la sierra madrileña, donde conocí a un hombre que, bajo un aspecto serio escondía a una excelente persona’, explicó.
El escritor argentino, a quien le gusta experimentar con todos los géneros literarios, desde la poesía al teatro, analiza en tono de humor aspectos de la vida que todo ser humano comparte.
’Al igual que el protagonista, no todo el mundo es lo que parece’, argumentó Salem antes de recordar que muchas veces el trabajo que realiza una persona no tiene nada que ver con su vida personal y familiar.
’Por eso, el personaje principal, Juan Pérez, no tiene ningún inconveniente en afirmar, al final del primer capítulo, que es más difícil ser padre que asesino a sueldo’, apuntó.
El protagonista experimentará a lo largo de la historia un renacer sexual en plena crisis de los 40 y se enamorará de nuevo mientras emprende la búsqueda de su próxima víctima en un escenario en el que coincidirá con su ex mujer, sus hijos, un juez estrella y un amigo de la infancia, entre otros.
Salem, periodista además de escritor y admirador entre otros de los españoles Eduardo Mendoza y Jardiel Poncela, ha experimentado también con la poesía y el teatro.
Entre sus libros de poemas destacan ’Te he pedido amablemente que te mueras’, dedicado a su propia sombra; ’Foto borrosa con mochila’ y ’Poemas al otro lado de la barra’.
Su primer novela, ’Camino de ida’, un texto ’con cierto toque policiaco también’, le dio la oportunidad de darse conocer a los lectores a los que se dirige ’de manera directa y sencilla’.
’No me gusta recrearme en las descripciones, prefiero dejar espacio para que el lector se meta en el personaje y llegue a entenderlo’, afirmó.
Afincado en España desde hace 23 años, Carlos Salem codirige desde 2006 el Bukowski Club de Madrid, un espacio literario situado en el madrileño barrio de Malasaña, escenario de tertulias, donde la gente acude a leer sus cuentos o poemas.
Entre sus próximos proyectos figura ’intentar llevar a escena una obra de teatro’ y seguir escribiendo.
’No sé si lo próximo será una novela negra, no tengo ni idea, pero aunque sea una tragedia tendrá un toque de humor. La vida es para reirse’, concluyó.
Terra Actualidad - EFE
0 comentarios