Rescatan obra de Jim Thompson, un clásico del género negro

Sólo un Asesinato (1949) es el primero de los títulos recuperados del novelista, autor de una obra feroz y admirado por Stephen King y Stanley Kubrick.
A los 17 años, James Thompson comenzó a llevar una doble vida. De día estudiaba en el colegio politécnico de Fort Worth, en Texas, y de noche trabajaba como botones de un hotel de poca monta. Pero su verdadera ocupación allí no era cargar maletas, sino conseguir trago, drogas y putas para los pasajeros. De este modo se familiarizó con dos cosas: se volvió alcohólico y conoció el ambiente de mafiosos y jugadores de la ciudad, un mundo excitante y peligroso que luego retrataría notablemente en sus novelas.
James era el verdadero nombre de Jim Thompson, uno de los autores más escalofriantes de la narrativa norteamericana y uno de los grandes nombres del género negro. Admirado por Stanley Kubrick, Stephen King y Roberto Bolaño, Thompson escribió 29 novelas, colaboró con el cine y murió en la más absoluta indiferencia, en 1977. Cuentan sus biógrafos que poco antes de fallecer le confió a su esposa un vaticinio o más bien una esperanza: "Limítate a esperar. Me haré famoso cuando lleve unos diez años muerto".
Y así fue. Ahora, toda su obra ha empezado a ser reeditada en español por el sello El Aleph, distribuido en Chile por Océano. El primer título en llegar es Sólo un Asesinato, su tercera novela y el libro con el que comienza su gran saga de asesinatos en la América profunda. El volumen viene arropado con una decidora frase de Stephen King: "Mi autor favorito de novelas de crimen y misterio -a menudo imitado, pero jamás igualado- es Jim Thompson".
Después de publicar cuentos en revistas pulp, ejercer una veintena de oficios, inscribirse y renunciar al Partido Comunista, publica Sólo un Asesinato (1949), novela que llama la atención por su crudeza y su ambiente opresivo. El libro es la historia de Joe Wilmont, un tipo que administra la única sala de cine de un pueblo y que lleva una doble vida amorosa: con su esposa Elizabeth y con la empleada Carol. Su mujer acepta marcharse a cambio de 25 mil dólares y entre los tres arman un sangriento plan para cobrar su seguro de vida.
La novela vendió 750 mil ejemplares en la época y patentó el sello de la narrativa de Thompson: personajes comunes y corrientes bajo los cuales hierve la avaricia, los celos o esconden sicópatas en serie; relaciones perturbadas, a veces incestuosas y donde el crimen se comete por estúpidas ambiciones.
La Tercera. Chile
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