El muerto indiscreto
Correa mezcla periodismo de investigación con corrupción en 'El muerto indiscreto'
El escritor argentino presentó la edición de la novela con la que ganó el L Premio Ateneo-Ciudad de Valladolid
MARÍA AURORA VILORIA/VALLADOLID
Rubén Correa ha hecho un «cruce trasversal de múltiples géneros», desde la novela negra al periodismo de investigación pasando por una historia de amor y con la corrupción política y económica al fondo, en 'El muerto indiscreto', la novela con la que el pasado 12 de mayo ganó el L Premio Ateneo-Ciudad de Valladolid. El escritor argentino, que actualmente vive entre Miami y Madrid, añadió que construir esta historia, «en la que lo que parece real es ficción y lo que creemos imaginado constituye la realidad», ha sido «una gran prueba en la que tenía como meta mantener atrapado al lector».
Periodista de profesión especializado en economía, Correa, que presentó ayer la edición de la novela realizada por Algaida, ha trabajado en 'La Nación', en la revista 'Somos' y en la agencia Noticias Argentinas y ha sido además productor de televisión, corresponsal de '5 Días' y colaborador de publicaciones de varios países. Así ha conocido tanto los años de la dictadura como los gobiernos de Alfonsín y de Menem, quien, con nombre falso, se ha convertido en uno de los personajes principales de la obra.
Metáfora política
El libro, con el que su autor ha querido rendir homenaje a los periodistas de su generación que destaparon la corrupción en Argentina, es también una metáfora de la «lógica sinuosa que ha regido la política» de su país en las últimas décadas y cuyas claves no piensa revelar. «Prefiero correr el riesgo de que el lector no entienda la novela», dice.
Correa, que tiene casi acabada su segunda obra, 'El encargo', de la que surgió ésta, se ha convertido en el primer autor iberoamericano que ha ganado el premio, dotado con 25.000 euros, como recordó Gonzalo Muinelo, presidente del Ateneo, en la presentación, a la que asistieron además el alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva; el presidente de la Diputación, Ramiro Ruiz Medrano, y el director de narrativa de Algaida Editores, Miguel Ángel Rodríguez Matellanes.
www.nortecastilla.es
El escritor argentino presentó la edición de la novela con la que ganó el L Premio Ateneo-Ciudad de Valladolid
MARÍA AURORA VILORIA/VALLADOLID
Rubén Correa ha hecho un «cruce trasversal de múltiples géneros», desde la novela negra al periodismo de investigación pasando por una historia de amor y con la corrupción política y económica al fondo, en 'El muerto indiscreto', la novela con la que el pasado 12 de mayo ganó el L Premio Ateneo-Ciudad de Valladolid. El escritor argentino, que actualmente vive entre Miami y Madrid, añadió que construir esta historia, «en la que lo que parece real es ficción y lo que creemos imaginado constituye la realidad», ha sido «una gran prueba en la que tenía como meta mantener atrapado al lector».
Periodista de profesión especializado en economía, Correa, que presentó ayer la edición de la novela realizada por Algaida, ha trabajado en 'La Nación', en la revista 'Somos' y en la agencia Noticias Argentinas y ha sido además productor de televisión, corresponsal de '5 Días' y colaborador de publicaciones de varios países. Así ha conocido tanto los años de la dictadura como los gobiernos de Alfonsín y de Menem, quien, con nombre falso, se ha convertido en uno de los personajes principales de la obra.
Metáfora política
El libro, con el que su autor ha querido rendir homenaje a los periodistas de su generación que destaparon la corrupción en Argentina, es también una metáfora de la «lógica sinuosa que ha regido la política» de su país en las últimas décadas y cuyas claves no piensa revelar. «Prefiero correr el riesgo de que el lector no entienda la novela», dice.
Correa, que tiene casi acabada su segunda obra, 'El encargo', de la que surgió ésta, se ha convertido en el primer autor iberoamericano que ha ganado el premio, dotado con 25.000 euros, como recordó Gonzalo Muinelo, presidente del Ateneo, en la presentación, a la que asistieron además el alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva; el presidente de la Diputación, Ramiro Ruiz Medrano, y el director de narrativa de Algaida Editores, Miguel Ángel Rodríguez Matellanes.
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